Ya es hora, nuevamente, de retomar el camino abandonado por el sistema en el cual estoy nuevamente, el común, el de todos, el mundo con sus sabores y sinsabores.
Por encima de eso puedo y haré el intento por volver a momentos únicos e irrepetibles, en estos mundos paralelos en los cuales tantos sueños he vivido y experimentado.
Voy a subir las montañas eternas, a respirar el aire helado antes que asome el sol, a sudar el cansancio de andar y andar, a mirar los colores de la vida desde otro prisma.
Ya es hora.